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OSTEOPOROSIS Y MENOPAUSIA: Síntomas y tratamiento

La osteoporosis es una de las tantas patologías metabólicas que conocemos y encontramos a día de hoy. Se caracteriza por una pérdida de masa esquelética, y como consecuencia, aumenta el riesgo de romperse debido a una mayor delgadez y fragilidad del hueso.

Con una alta prevalencia en la sociedad actual y con una instauración y desarrollo asintomático y silencioso, se la ha nombrado como “epidemia silente del siglo XXI”. Tanto es así, que es la enfermedad ósea más común.

Tipos de osteoporosis

La osteoporosis se puede clasificar en tres tipos:

1. Primaria. Relacionada con deficiencia de estrógenos y/o edad.

2. Secundaria. Causada en parte por otras enfermedades o medicamentos. Existen numerosas causas de este tipo de osteoporosis que incluyen trastornos endocrinos y metabólicos, deficiencias nutricionales, trastornos genéticos y otras afecciones diversas, así como también medicamentos.

3. Idiopática. Caracterizada por baja densidad ósea y fracturas en adultos jóvenes sin causa conocida.

Una vez introducido el tema, en este post, nos centraremos en la osteoporosis primaria, concretamente con la osteoporosis parecida por las mujeres con (pre-post) menopausia. Dicho esto, ¿Quién corre el riesgo de perder masa ósea? ¿Qué causa la osteoporosis postmenopáusica y osteoporosis en general? ¿Qué signos y síntomas tiene la osteoporosis? ¿Cómo se diagnostica? ¿Quién debe hacerse las pruebas? ¿Qué tratamientos hay? ¿Cómo se previene? Sigue leyendo para resolver todas estas dudas.

Osteoporosis postmenopáusica

Es el tipo de osteoporosis de mayor prevalencia. En el siguiente estudio comentan que entre el 30 y el 50% de las mujeres postmenopáusicas desarrollarán esta enfermedad.

¿Sabes por qué se produce? A continuación, te lo explico.

Los estrógenos (hormonas sexuales femeninas) mantienen el equilibrio entre la resorción y la formación del hueso. Así que, cuando disminuyen este tipo de hormonas, se produce una destrucción del hueso más o menos envejecido, sin que se acompañe de formación de hueso nuevo con igual equidad. Por lo tanto, el balance es de pérdida de masa ósea y de progresión acelerada hacia la osteoporosis.

Factores de riesgo de la osteoporosis postmenopáusica

Debes saber que cualquier persona de cualquier edad puede desarrollar osteoporosis. Sin embargo, en la osteoporosis postmenopáusica (por razones obvias relacionada con el sexo femenino) está ligada a dos condiciones:

1. Envejecimiento: A mayor edad, mayor riesgo.

2. Menopausia: No producción o disminución de hormonas sexuales femeninas (estrógenos y progesterona).

Otros factores de riesgo de osteoporosis

Además, aparte de los dos factores de riesgo anteriores, hay muchos otros que pueden llevar a la pérdida de hueso y a la osteoporosis (sin entrar en detalle de qué tipo).

Por un lado, los principales factores que no puedes cambiar son:

– El sexo. Las mujeres tienen osteoporosis con más frecuencia que los hombres. Además, las mujeres que sufren irregularidad en la menstruación y/o son carentes de aparato reproductor por diferentes causas, suelen tener más riesgo.

– El tamaño del cuerpo. Las mujeres de pequeña altura y delgadas tienen mayor riesgo.

– La raza. Las mujeres blancas y asiáticas corren un mayor riesgo. En cambio, las mujeres negras y de origen hispano o latino corren un menor riesgo.

– Antecedentes familiares de osteopenia u osteoporosis.

– Tener baja densidad mineral ósea.

Por otro lado, los principales factores que sí, o tal vez, puedes cambiar son:

– Bajos niveles de hormona sexual. En las mujeres ya se ha comentado en el apartado anterior. Los hombres con bajos niveles de testosterona pueden ser más propensos a la osteoporosis.

– Desórdenes alimentarios como anorexia nerviosa y bulimia.

– Llevar un patrón alimenticio bajo en calcio y vitamina D, o absorción inadecuada del intestino.

– Ciertos medicamentos como los corticoesteroides (prednisona o cortisona).

– Estilo de vida sedentario (inactividad o falta de ejercicio) o inmovilidad.

– Hábito de fumar (el tabaco).

– Tomar bebidas alcohólicas.

¿Qué signos y síntomas tiene la osteoporosis?

Tal y como se ha comentado en el inicio del post, es una enfermedad silenciosa, ya que no presenta síntomas. No obstante, en algunas ocasiones, puedes darte cuenta que padeces de esta patología después de fracturarte un hueso.

¿Cómo se diagnostica la osteoporosis?

Ve al médico para que te haga un estudio donde se mida la densidad mineral ósea (DMO), es decir, la cantidad de hueso que tienes en una zona determinada. Normalmente, estas mediciones se realizan en la parte baja de la columna y en la cadera.

Hay diferentes técnicas para medir la DMO, pero actualmente el método más ampliamente usado por su precisión y muy baja dosis de radiación es la absorciometría de rayos X de doble energía (denominada DXA o DEXA).

¿Quién debe realizarse la prueba de densidad mineral ósea?

– Todas las mujeres de 65 años o más, incluso cuando no tengan factores de riesgo.

– Todas las mujeres postmenopáusicas de menos de 65 años que tienen uno o más factores de riesgo (excluido el de ser de raza blanca o asiática).

– Todas las mujeres postmenopáusicas que hayan sufrido fracturas.

¿Cómo se trata la osteoporosis?

Generalmente, el tratamiento exitoso de la osteoporosis incluye una combinación entre cambios en el estilo de vida, suplementos nutricionales y medicamentos. Claro está, bajo la supervisión de un equipo multidisciplinar de profesionales de la salud.

Por lo tanto, si padeces osteoporosis tu médico y/u otros profesionales de la salud, te aconsejaran lo siguiente:

– Consumir unos niveles adecuados de calcio, magnesio, vitamina K o tener unos niveles adecuados de vitamina D y no abusar de la sal. Acude a un profesional sanitario como a un/a dietista-nutricionista que te enseñe a cómo fomentar estos micronutrientes dentro un patrón alimentario saludable.

¿Sabías que la mayor producción de vitamina D se realiza a través de la piel? Pues puede que te ahorres el suplemento dedicándote 15-20 minutos diarios de exposición solar.

– Ser físicamente activa/o y realizar ejercicios con carga del propio peso (p. ej. caminar, bailar o levantar pesas) y ejercicios que mejoren el equilibrio (p. ej. yoga). Realiza por lo menos 30 minutos al día cinco veces a la semana de actividad física. Acude a un/a profesional del ejercicio físico para que te ayude y supervise con tu plan de entrenamiento.

– Medicamentos. Es posible que el médico te recete tratamiento farmacológico para prevenir más pérdida ósea o para regenerarla. Los medicamentos más comunes para tratar la osteoporosis son:

– Bifosfanatos.

– Moduladores selectivos de los receptores de estrógeno (MSRE).

– Denosumab.

– Calcitonina.

– Terapia de reemplazo hormonal.

– Hormona paratiroidea o teriparatida.

No utilices ningún tipo de tratamiento sin consultar con su médico. Los medicamentos tienen beneficios pero a la vez tienen riesgos, efectos secundarios. Por lo tanto, no tomes ninguna iniciativa propia sin prescripción médica.

¿Cómo puedo prevenir la osteoporosis a través del ejercicio físico?

Una vez revisada tu alimentación y dentro de un estilo de vida saludable, ¿sabes cómo la actividad física puede ser tu gran aliada en estos casos?

Cuando realizas ejercicio el hueso recibe una tensión mecánica que es beneficiosa para él, ya que se facilita su desarrollo y disposición de sales de calcio. Si a esto le sumas que todas aquellas actividades físico-deportivas de impacto (p. ej.: jugar al tenis, al voleibol o correr) incrementan más la densidad mineral ósea que aquellas actividades sin impacto (p. ej.: la natación), y que éstas se realizan al aire libre, exponiéndote a los rayos del sol, el beneficios será más pronunciado en cuánto a formación de hueso.

Para finalizar, me gustaría decir que este post no pretende ser una “receta” a seguir, sólo un documento de carácter informativo. Cada caso es diferente y todas las recomendaciones tienen que ser personalizadas.

Post escrito por Jordi Rabassa, entrenador personal especialista en Fit Over 50 de KOA Center.

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